Cistitis una dolencia dolorosa

No es que sea algo grave, pero si la padeces a menudo –esta inflamación de las vías urinarias nos afecta un 20% más que a los hombres- seguro que no te olvidas de lo molesta y dolorosa que es. Sin embargo hay distintos métodos para librarte de ella.

Los cambios hormonales las situaciones de estrés o coger frío, llevar mucho tiempo el bañador mojado por ejemplo, hacen que la capa protectora que recubre nuestra vejiga sufra una congestión y no nos defienda de las bacterias que pasan a través de la uretra en las relaciones sexuales o en los análisis ginecológicos, con lo que se produce una contaminación bacteriana en la vejiga y, como consecuencia, la cistitis.

Existen vacunas para las mujeres que tienen episodios recurrentes –más de tres al año- y también instilaciones intravesicales (aplicar medicamentos directamente en la vejiga). Aunque lo primero que se recomienda aparte del tratamiento con antibióticos, son métodos más naturales como mantener una correcta ingesta de líquidos, realizar ejercicio de forma habitual, poner calor en el abdomen y tomar concentrados de arándanos y antioxidantes para evitar la agregación de bacterias.

Con la fisioterapeuta se trata el problema desde el origen, que puede estar en que la mujer tiene la vejiga caída, muchas veces por el parto o en que ésta no se vacía por completo y quedan residuos de orina tras la micción, o en una forma de hacer pis entrecortada o, incluso en un estreñimiento crónico.

La fisioterapia mejora la sintomatología, reduce las recaídas y, en muchos casos, va directamente a la raíz del problema, solucionándolo. No todas las cistitis son iguales, por lo que no se trabaja de la misma forma con todos los pacientes. A veces, es necesario mejorar el tono de los músculos del suelo pélvico, otras conviene enseñar a relajar esos músculos mientras se orina.

Con la neuropatía se combate la causa y no el síntoma. Una dieta rica en fibra y alimentos de sabor ácido, con poco azúcar y abundante agua, evita el estreñimiento, crea un medio sanguíneo alcalino par que el organismo potencie sus defensas naturales y ayuda a que no se desarrollen las bacterias en la orina.

Para ello hay que tener buena higiene después de ir al baño –lavarse de delate hacia atrás, para que los microorganismo no penetren en la uretra- pero también ayuda a tomar estos remedios como píldoras de equinácea o gayuba, que actúa sobre la necesidad imperiosa de orinar, zumos de arándanos y de grosellas. Las infusiones de abedul y condimentos de ajo y cebolla. Estas plantas son antiinflamatorias, antibióticas y diuréticas, y logran que el sistema inmune funcione correctamente.