El ABC de las cremas reductoras

De alguna forma es como si la naturaleza se hubiera empeñado en hacerles difíciles la vida a las mujeres, una grave injusticia si las hay. Y así es como a medida que el tiempo pasa debemos prestar más y más atención a esos productos que ayudan a reducir las grasas como es el caso de las cremas reductoras.

Lamentablemente, el cuerpo de la mujer tiende a la acumulación de grasas, en especial en algunas zonas como la cintura, los muslos o las caderas. Esto sucede porque son las zonas del cuerpo en donde en principio se almacenan los azúcares y lípidos.

Si bien no obran como una varita mágica, las cremas reductora s pueden ayudar a reducir el tejido adiposo en estas zonas críticas aunque para hacerlo hay que aplicarlas en forma correcta.

Las cremas reductoras deben contener algunos principios activos como la cafeína, que ayuda a degradar a las grasas, el té verde, el extracto de castaña de la India o la hiedra. Estos activos se ocupan de reducir la fabricación de lípidos del tejido adiposo y ayudan a degradar las reservas de los azúcares y los cuerpos grasos.

Sin embargo, para que las cremas funcionen hay que acompañarlas con una dieta. También se aconseja realizar actividad física, al menos unos 45 minutos. En esos casos podrás comenzar a ver los resultados a los 15 días aproximadamente.